¿Lees un texto y no recuerdas nada? Éstas son nuestras estrategias para mejorar la comprensión

A menudo ocurre que tenemos dificultades para comprender un texto que acabamos de leer.

Esto puede ser frustrante y poner a prueba nuestra paciencia. Pero, ¿por qué ocurre esto? ¿Y qué podemos hacer para no quedarnos atascados y poder comprender el texto?

 

En primer lugar, es importante comprender que nuestra capacidad para comprender un texto depende de varios factores, como nuestro nivel de comprensión de las palabras y frases utilizadas, nuestro conocimiento del tema y nuestra capacidad de concentración. Si falta uno de estos factores, puede resultar difícil comprender el texto.

 

Por ejemplo, si el texto contiene palabras con las que no estamos familiarizados o frases complejas, puede resultar difícil seguir el hilo del discurso y comprender el significado general del texto. Del mismo modo, si el tema es desconocido o poco familiar, puede resultar difícil comprender el contexto del texto y su significado. Por último, si no estamos suficientemente concentrados o nos distraen otros factores, podemos tener dificultades para comprender el texto aunque conozcamos las palabras y el tema.

 

Afortunadamente, hay algunas soluciones que podemos adoptar para superar estas dificultades y comprender el texto. En primer lugar, es importante prestar atención a la lectura e intentar centrarse en el texto. Si es necesario, podemos intentar eliminar las distracciones y crear un entorno de lectura adecuado. Además, si el texto contiene palabras o conceptos desconocidos, podemos intentar comprender su significado leyendo el contexto o, si es necesario, consultando un diccionario u otras fuentes.

 

Si el texto trata un tema con el que no estamos familiarizados, podemos intentar profundizar en él antes de empezar a leer el texto, para comprender mejor el contexto y la información presentada.

Además, es importante no ser demasiado duros con nosotros mismos y no obsesionarnos demasiado con entender cada palabra o frase. A veces puede ser útil leer el texto varias veces o intentar resumirlo para ayudarnos a comprender su significado general.

 

Otro factor importante para favorecer la concentración y la comprensión del texto es la relajación. Cuando estamos demasiado tensos o estresados, puede resultar difícil concentrarse en la lectura y comprender el significado del texto. Por lo tanto, es importante que te tomes tiempo para desconectar y relajar la mente antes de empezar a leer. Esto puede incluir actividades como la meditación, los estiramientos o la respiración profunda. De este modo, podemos concentrarnos mejor en la lectura y aumentar nuestra capacidad de comprensión del texto.

 

En resumen, comprender un texto puede ser difícil a veces, pero hay algunas estrategias que podemos adoptar para superar las dificultades y entenderlo mejor. Relájate, concéntrate en la lectura e intenta comprender las palabras y el tema, y… ¡no seas demasiado duro contigo mismo! ¡¡¡Diviértete!!!

Comparte este artículo

Explora más artículos